En un nuevo episodio de maltrato laboral, los trabajadores del Tren Maya en el Tramo 6, frente 2 de Chumpon, municipio de Felipe Carrillo Puerto, han expresado su indignación tras una serie de injusticias por parte de los responsables del proyecto. Según los empleados, a pesar de su arduo trabajo, se les ha negado el aguinaldo, las vacaciones prometidas y la tradicional posada decembrina.
Los trabajadores, muchos de los cuales llevan más de un año laborando en el proyecto, recibieron la noticia de la cancelación de sus vacaciones justo cuando se disponían a viajar para pasar las festividades con sus familias. “Nos dijeron que tendríamos una semana de vacaciones en diciembre, pero a la hora de partir, nos las cancelaron”, relató uno de los afectados.
Posada a puerta cerrada y sin aguinaldo
La situación empeoró cuando los responsables, liderados por el “Mayor” Colmenares, realizaron una posada a puerta cerrada, excluyendo a los trabajadores del Tramo 6, quienes según los denunciantes, fueron fundamentales para el avance del proyecto. “Nos dejaron afuera de todo. No tuvimos posada, y ni siquiera el aguinaldo que por ley nos corresponde,” indicaron los empleados.
Además, durante los pagos de finiquitos, muchos trabajadores aseguran que no se les pagó el monto acordado en sus contratos, acusando que se hicieron ajustes y descuentos sin explicación alguna. La contadora Alma, involucrada en el proceso, es señalada por varios empleados por presuntos actos de corrupción y desvío de recursos.
Una vergüenza para el proyecto
La situación ha generado una gran tristeza y frustración entre los trabajadores, quienes han expresado sentirse abandonados por aquellos que deberían valorar su esfuerzo y dedicación. “Es una vergüenza lo que pasa aquí. Hemos dado todo por este proyecto y siempre nos tratan como si no importáramos,” comentaron algunos de los afectados.
La mayoría de los trabajadores, que ya tenían planeado reunirse con sus seres queridos, se vieron obligados a cancelar sus planes debido a las decisiones unilaterales tomadas por los responsables del Tramo 6.
Este escándalo pone en evidencia la falta de respeto y consideración hacia los trabajadores que han hecho posible el avance del Tren Maya, y refleja una vez más las tensiones que existen dentro de este megaproyecto.
